Antes de nada, siempre elige lagos que estén cerca de urbes o pueblos donde tengan los servicios mínimos (una farmacia, un centro de asistencia sanitaria, una pequeña tienda y baños públicos con botiquines) ya que siempre con ellos podréis necesitar alguno de ellos.
También recuerda en vez de acampar, conseguir un alojamiento económico en forma de cabañas de madera, que serán muy especiales para poder descansar y disfrutar de la naturaleza, haciendo que siempre haya un momento para abstraerte de la realidad de las ciudades donde normalmente se suele residir.
Piensa que también será bueno que el lago cuente con un parque natural en el que poder ver animales y aves, algo que te vendrá muy bien para educar a los niños. Algunos parques naturales tienen también parques infantiles que les ayudarán a pasarlo bien y a no sentirse en un lugar extraño. ¡Te encantará el viaje y no lo pasarás mal organizándolo con estos trucos familiares!
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